"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

Imagen
Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

Oración para el sábado 17 de febrero.


Señor mío y Dios mío, en esta mañana me acerco hasta Ti para darte gracias por tu generosidad, por tu afecto y por todas las cosas maravillosas que Tú haces en mi vida. Gracias por haberme cuidado en la noche que ya pasó y por darme tu bendición para vivir en este nuevo día que apenas comienza.
Gracias Señor por mi familia y por mis amigos, por cuidar siempre de nosotros y ser nuestro generoso proveedor. Qué hermoso es vivir con la certeza de que Tú siempre estás a nuestro lado concediéndonos el pan de cada día y orientando nuestros pasos por el mejor camino posible.

Amado Dios, en esta mañana quiero entregarte todos mis anhelos y propósitos para el nuevo día. Te suplico que me des sabiduría para saber tomar cada una de mis decisiones, por favor concédeme paz para no dejarme llevar por la emociones fuertes que me arrastran a actuar sin control y dame generosidad para vivir sin egoísmo y poder ser un humilde instrumento de tu obra.

Te suplico que en este día también seas abriendo caminos de prosperidad para mí y para los míos, que nos cubras con tu manto y nos protejas de las envidias, del falso amigo y de todos aquellos que con sus pensamientos o sus acciones nos desean el mal.

Por favor mira nuestras esperanzas y nuestros anhelos y ayúdanos a avanzar con paso firme y cierto por el camino que nos llevará a aquel destino que tanto anhelamos.


Amado Dios, en este nuevo día suelto todo mi dolor y todo aquello que alguna vez me ha lastimado. Te pido que me des fortaleza, fe, esperanza, que me cubras con el poder de tu amor y me ayudes a vivir en día en bendición, bienestar, salud y victoria, Amén.

Comentarios