"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

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Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

VIERNES 27 DE JULIO



Amado Dios, hoy me presento ante Ti para darte gracias por este nuevo día. Gracias Señor por cuidar de mí y por cuidar de mi familia, por todas tus bendiciones y por guiarnos por senderos de salud, paz y prosperidad
También te pido perdón si alguna vez te he defraudado; por favor perdona mis pecados y desobediencias. Señor, yo te amo y he decidido que cada día de mi vida quiero vivirlo de una manera que sea agradable para Ti, por favor permite cada una de mis acciones sean para tu honra y gloria.

Hoy te pido que mires mi vida, mi hogar y la vida de las personas que amo, por favor acércate a nosotros e ilumina nuestro camino con la luz infinita de tu amor y tu bondad.

Padre, acompáñanos y guíanos en cada una de las actividades que hagamos el día de hoy, te suplico que nos permitas la dicha de vivir un día en paz y armonía y llévanos siempre por bellas sendas de bienestar y bendición.

Y si en algún momento el temor o la desesperanza se apoderara de nuestras vidas, por favor susurra a nuestros oídos palabras de aliento y renuevo, recuérdanos que Tú siempre estás de nuestro lado y que si Tú estás con nosotros nada ni nadie podrá derrumbarnos, pues Tú eres nuestro sostén y nuestro refugio seguro.

Amado Dios, hoy me regalas un nuevo día para ser mejor de lo que fui ayer, para crecer, trabajar con amor y poder alcanzar mis metas y más grandes anhelos. Quiero dar lo mejor de mí a cada instante y también ser tu instrumento, para que todos aquellos que hoy vea y trate puedan irse con más entusiasmo y serenidad.

Señor, te pido que todo lo que haga durante este día sea iluminado por tu preciosa luz, por favor cuida de mí, nunca te apartes de mi vida y líbrame de todo mal, Amén.

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