"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

Imagen
Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

Oración para el sábado 17 de noviembre.



Amado Dios, hoy me presento ante Ti, lleno de esperanza y alegría a darte gracias por cada cosa que Tú haces en mi vida y en la vida de mi familia. Gracias por tu amor, gracias por tu bondad, gracias por tu generosidad, pero ante todo gracias por llenar nuestra vida de paz y bienestar.
Tú conoces lo que es mejor para nosotros; confiamos en tus planes perfectos y por eso, llenos de fe decimos: Padre celestial, que se haga siempre tu maravillosa voluntad.

Amado Dios, hoy quiero poner en tus manos mi vida y la vida de las personas que amo, nuestra salud, nuestros planes y nuestros anhelos.

Por favor tómanos de la mano y guíanos por caminos de bien, de alegría y de prosperidad. Te suplico que habites en nuestros corazones y te lleves todo rencor y toda tristeza.

Y si en algún momento tuviésemos que atravesar por medio de una tormenta o un momento de dificultad, por favor avívanos en la esperanza y no permitas que perdamos nuestra fe.

Danos la sabiduría para tomar buenas decisiones, la fortaleza necesaria para seguir adelante con ilusión y por favor mantente a nuestro lado, iluminando nuestro camino y guiando cada uno de nuestros pasos.

Padre, yo te amo con todas mis fuerzas y confío en tus promesas, por esta razón dejo este nuevo día en tus manos y te pido que a donde yo asista, seas Tú asistiendo conmigo. Por favor abrázame con tu manto de luz y de amor, líbrame de todo mal y no me dejes caer en tentación.

Permite que en mi corazón resplandezca la alegría, la esperanza, el bienestar, la paz y tu bendición; Hoy confiaré más en mí y aceptaré todos los planes que Tú tienes para mi vida, porque Tú eres bueno y siempre llenas mi camino con hermosas bendiciones, Amén.

Comentarios