"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

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Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

ORACIÓN POR LA PAZ.


Amado Dios, hoy me presento ante ti, con un clamor que nace desde lo más profundo de mi corazón. Cada vez, más el mundo necesita más de tu paz.
Te pido amado señor que la tierra se colme de tu amor y bondad, Que donde haya discordia tú siembres entendimiento, que donde haya ira tú la reemplaces con afecto y que la humanidad nunca olvide que la vida es sagrada, que todos somos tus hijos y por lo tanto todos somos hermanos, que deben entenderse, amarse y ante todo respetarse.

Permite oh Dios, que en lugar de armas en el mundo haya lápices para todos los niños que quieren educarse y que en lugar de bombas la humanidad pueda estallar en gritos de alegría, porque solo tú eres todo poderoso y porque solo a través de ti el mundo podrá conseguir la paz que tanto anhela.

Haz que tu manto protector cubra a los miles que viven en zonas de conflicto y que tu fuerza llegue hasta la vida de todos aquellos que han perdido la esperanza. Cura a quienes han sufrido heridas en la cruda guerra y dale consuelo a todos aquellos que han perdido seres amados en confrontaciones que nunca tendrán sentido. Protégeme a mí y a las personas que amo de todo mal y peligro.

Derrama tu misericordia sobre el mundo y haz que tu santo espíritu ilumine la mente de aquellos que gobiernan las naciones, para que tengan consciencia del bien y del mal y batallen unidos por la defensa de la vida, la paz y el amor.

Gracias señor porque sé que oyes las oraciones de tus hijos y porque quien ante ti se presenta con fe, siempre recibe respuesta a sus suplicas, amén.

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