"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

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Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

Oración de gratitud por el mes de agosto.



Amado Dios, estamos viviendo las horas finales de este mes de agosto y en este instante yo me acerco hasta Ti para darte gracias por tu amor, por tu guía y por tu compañía a lo largo de los 31 días de este mes.
Gracias Señor por haber cuidado de mí y de mi familia, gracias porque tu mano generosa nos dio todo e incluso más de los que necesitábamos y gracias por nuestro hogar, por los alimentos que Tú llevas hasta nuestra mesa y sobre todo por permitirnos llegar al final de este mes con salud y voluntad para seguir adelante.

Han pasado 31 días de triunfos, alegrías, tristezas y aprendizajes. Te agradezco por todos los momentos de este mes en que fui feliz y también te doy gracias por las pruebas y las dificultades que tuve que atravesar, pues a través de ellas pude comprender que tus tiempos y tus planes son perfectos y que cuando Tú me cierras una puerta, lo haces por mi bienestar y porque tienes cosas más grandes preparadas para mí.

Padre celestial, en este instante quiero entregarte mi vida, la vida de mi familia y todos nuestros planes para el nuevo mes de septiembre que está a punto de llegar. Te suplico que tu palabra inspire todas nuestras acciones, que encontremos nuevas oportunidades para ser mejores personas y alcanzar aquellas metas que nos hemos propuesto obtener.

Por favor cuida siempre de nosotros y de nuestros hogares, mira nuestras luchas, nuestros anhelos, nuestras necesidades y no permitas que decaigamos ante la dificultad.

Amado Dios, agosto llegó a su fin. Gracias por las metas cumplidas, por los momentos buenos y por todo lo que me hizo crecer. Confío en Ti y en tus planes, desde ahora pongo el nuevo mes de septiembre en tus manos y declaro con amor que será un mes colmado de milagros, esperanza, salud, prosperidad y bienestar, Amén.

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