"EL CARBÓN APAGADO NO QUEMA, PERO MANCHA".

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Se cuenta que Sofronio, un virtuoso ciudadano romano, tenía una hija muy hermosa llamada Eulalia. En cierta ocasión su hija le pidió permiso para visitar a Luciana, una mujer con no muy buenos principios, por lo que Sofronio le negó su autorización. ¿Me crees demasiado débil?, Respondió indignada Eulalia. Sofronio, tomó un carbón apagado y le pidi ó a su hija que lo sostuviera en su mano. Al ver que la joven dudaba, el padre le aseguró que no se quemaría. Eulalia obedeció y su blanca mano se vio inmediatamente manchada. Al ver esto la joven, muy molesta, le dijo a su padre que debían tener mucho cuidado para manejar el carbón. Es verdad respondió el padre porque aunque no queman, tiznan. Lo mismo ocurre con las malas compañías y conversaciones. En muchas ocasiones creemos que el mantener conversaciones o una amistad con alguien que no tiene una vida correcta, que se expresa de manera inadecuada, que no acepta consejos sino que se empeña en vivir desordenadamente no nos afectará. Si b

Oración para el lunes 21 de octubre de 2019.



Amado Dios, hoy me acerco hasta Ti para darte gracias por este nuevo amanecer que Tú nos has regalado, por tus cuidados, por tu misericordia, por tu amor incondicional y por estar siempre a mi lado dándome fuerza y protegiendo mis pasos. Es hermoso poder empezar cada día con la seguridad que solo da tu entrañable compañía.

Hoy inicia una nueva semana y con ella llegan 7 nuevos días en los que daré lo mejor de mí para poder alcanzar mis objetivos.

Señor, te pido que esta semana que inicia sea de mucha protección y bendición para mí y para los míos. Tú mejor que nadie conoces nuestras vidas, nuestra alma, nuestras necesidades más latentes y también sabes cuando tenemos tristezas o temores.

Te pido que tengas misericordia de nosotros y que en esta nueva semana seas Tú abriendo caminos de bendición, bienestar y esperanza.

Por favor abrázanos con tu amor, llévate de nuestra vida cualquier preocupación y danos fuerza, valor y sabiduría para asumir nuestros retos de cada jornada. Toca también nuestro corazón para que nazcan en él los sentimientos de la empatía y la bondad, para así, poder servir a los demás con alegría y ser un humilde instrumento de tu obra.

Padre celestial, te pido que seas Tú tomándonos de la mano y ayúdanos a avanzar por verdes valles de paz, tranquilidad y con frescas aguas que nos aviven y calmen nuestra sed. Por favor abre aquellas puertas que aún están cerradas y ayúdanos a alcanzar aquellas peticiones por las que tanto te hemos clamado.

Amado Dios, gracias por escuchar mi oración y por la alegría de vivir una nueva semana. En este día dejo todo mi temor a un lado y pongo mi confianza en Ti, porque sé que Tú serás protegiendo mi vida, la vida de mi familia y cólmanos con tu amor, tu dicha y tu prosperidad, Amén.

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